Estoy dando una ya, larga vueltita por la vida. Como no puedo hacer todo el tiempo lo que más me gusta, entre otras cosas en el ínterin, pinto y a veces escribo cuentos. Aunque me resulte medio espantoso decirlo así, pinto desde mediados del siglo pasado. Desde 1953 al 60, expuse mis trabajos en muestras personales o de conjunto en Buenos Aires y diferentes puntos del país. Tuve bastante éxito. Después, por causas varias; viajes, vagancia o simplemente falta de ganas, espacié bastante el exponer. La última, más o menos importante, fue en el año 96. Acá mostraré, algunas de las cosas pintadas por mí, en los últimos 62 años. Lamentablemente no tengo fotos de los ya vendidos. Las que sí tengo, las iré poniendo en forma medianamente aleatoria y sin muchas pretensiones de que esto sea una retrospectiva. Los cuentos los escribo, con mayor o menor asiduidad, desde los 60. Por supuesto los de aquellos tiempos, con influencias de Ionesco y de Beckett. Los de hoy, vaya a saber de quien. Si a alguien le interesa lo que pinto o escribo, me lo cuenta y vemos si esto sigue o no.
Si no fuera una pobre poeta, le compraría esta obra, pero tal vez no, porque hay tanto amor en ella que me pondría triste al no tener sobre quién sentarme a contemplarla. Un saludo melancólico de su fiel admiradora.
2 comentarios:
Si no fuera una pobre poeta, le compraría esta obra, pero tal vez no, porque hay tanto amor en ella que me pondría triste al no tener sobre quién sentarme a contemplarla. Un saludo melancólico de su fiel admiradora.
Realmente fue pintada con mucho amor,lamentablemente ya no tengo, a la que estuvo dedicada toda mi obra.
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